Unos de los proyectos inmobiliarios más sorprendentes del globo, The World, la lujosa urbanización de islas artificiales en las costas de Dubái, se hunde bajo el agua. El que un día fue concebido como un lugar exclusivo para multimillonarios y estrellas de Hollywood, pierde arena por momentos y algunos de sus canales de navegación se están obstruyendo por los sedimentos. Esto es lo que asegura un bufete británico que representa a una empresa que ha demandado al promotor estatal del proyecto, según publica el Daily Telegraph.
El promotor niega este extremo, y asegura en un comunicado que sus mediciones periódicas revelan que en tres años “no se observó ninguna erosión relevante que requiera de alimentación de arena».
Pero parece que el problema de fondo no es tanto la posibilidad de que la naturaleza engulla este megaproyecto inmobiliario sino que se convierta en uno de tantos negocios que el tsunami de la crisis financiera se ha llevado por delante. A pesar de que la empresa promotora Nakheel asegura que han vendido el 70% de las parcelas, al matrimonio Beckham entre otros, la realidad es que el archipiélago artificial sólo cuenta con una isla habitada, propiedad del emir dubaití.
Nakheel, formaba parte de Dubai World, el conglomerado estatal que tuvo que ser rescatado de unas deudas de alrededor de 25.000 millones de dólares a finales de 2009. Además, muchos inversores que compraron islas, ahora dicen que son incapaces de seguir financiando los trabajos de construcción a pesar de que los precios de las propiedades en Dubái han bajado a la mitad en menos de un año